¿Qué aprenderas en este artículo?
En este artículo aprenderás para qué sirven las hojas de ruta de producto o de empresa, y verás 5 tipos de roadmaps muy populares.
⏱️ Tiempo de lectura: 4 minutos.
Contenidos del artículo
- 1 🧭 ¿Qué es un roadmap y para qué sirve?
- 2 💌 Recibe estos artículos en tu buzón cada semana
- 3 🧠 ¿Por qué es importante conocer diferentes tipos de roadmap?
- 4 🧩 1. Now–Next–Later
- 5 🗺️ 2. Mapa de historias (Story Map)
- 6 🎯 3. Goal-Oriented Roadmap (Roman Pichler)
- 7 🕓 4. Timeline (tipo Gantt)
- 8 🛤️ 5. Visual Roadmap (tipo carretera)
- 9 🎯 ¿Cómo se relaciona una hoja de ruta con los OKR?
- 10 🧠 Reflexión final
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🧭 ¿Qué es un roadmap y para qué sirve?
Un roadmap (o hoja de ruta) es una visualización que representa la intención estratégica y táctica de un equipo a lo largo del tiempo. Su objetivo no es detallar cada tarea, sino mostrar qué queremos conseguir, cuándo y por qué caminos.
No se trata de un compromiso rígido. En entornos ágiles, el roadmap acepta la incertidumbre natural del desarrollo de producto. Su valor está en alinear a todos los implicados en torno a un rumbo compartido.
Además, muchas organizaciones lo usan para planificar las iniciativas estratégicas que deben desarrollarse en los próximos meses, facilitando la comunicación entre negocio, producto y tecnología.
👉 Más en: Cómo integrar OKR y Scrum en la ejecución estratégica
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🧠 ¿Por qué es importante conocer diferentes tipos de roadmap?
No existe un único roadmap que funcione para todos los contextos. Las necesidades de comunicación, el grado de incertidumbre y el nivel de alineamiento que requiere cada iniciativa varían según el tipo de organización, el momento del producto y las expectativas de los stakeholders.
Para seleccionar un roadmap, es importante pensar qué se le pide, p.e.
- Ayudar a los equipos y productos a alinearse con la estrategia,
- Ayudar a los equipos a alinearse entre sí,
- Entender las prioridades para mejorar la experiencia de cliente,
- Adaptarse a cambios de prioridades frecuentes, etc.
Conocer diferentes tipos de roadmap te da más opciones de adaptarte a diferentes contextos de tu empresa o de tu producto.
Vamos a ver 5 tipos de roadmap que pueden interesarte. 👇
🧩 1. Now–Next–Later
Objetivo
Mantener una herramienta ágil para comunicar las prioridades de la organización.
Cuándo es útil
- Cuando trabajas en entornos cambiantes o con alta incertidumbre.
- Para comunicar prioridades sin entrar en fechas concretas.
- En equipos que aplican enfoques ágiles como Scrum o Kanban.
Cuándo no funciona bien
- Si tu organización requiere fechas cerradas.
- Para dependencias complejas entre equipos o productos.
- Cuando se usa como única herramienta de planificación.
Cómo funciona
El equipo agrupa las iniciativas en tres columnas:
- Now: lo que está en marcha o a punto de empezar.
- Next: lo que probablemente venga después.
- Later: ideas a explorar más adelante.
Cada categoría refleja el nivel de compromiso. Las iniciativas en “Now” están priorizadas y claras, las de “Next” necesitan más preparación, y las de “Later” son hipótesis. Se revisa y actualiza con frecuencia.
Este tipo de roadmap fomenta la conversación continua, evita falsas expectativas sobre fechas y permite a negocio ver hacia dónde va el producto sin necesidad de un plan detallado.
👉 Puede interesarte: Cómo priorizar funcionalidades con OKR
🗺️ 2. Mapa de historias (Story Map)
Objetivo
Visualizar las funcionalidades desde el punto de vista del usuario y definir versiones incrementales que aporten valor real.
Cuándo es útil
Para diseñar el alcance de un nuevo producto o una funcionalidad compleja.
Para construir versiones de producto centradas en el usuario.
Como herramienta colaborativa con negocio, diseño y tecnología.
Cuándo no funciona bien
Si se usa como backlog sin contexto de usuario.
Si se convierte en una lista de tareas ordenadas, perdiendo su valor visual.
Si no se revisa tras aprender del uso real del producto.
Cómo funciona
Se colocan las actividades principales del usuario en la parte superior (por ejemplo, registrarse, reservar, pagar), y debajo las historias o funcionalidades que permiten completar cada actividad.
Después se traza una línea horizontal que separa las funcionalidades imprescindibles (primer release) de las opcionales o futuras. Esto permite definir entregas con sentido de negocio, no por complejidad técnica.
Cuando el OKR guía el propósito, se priorizan funcionalidades que más impacto tengan en el resultado deseado. Por ejemplo, si el objetivo es mejorar la conversión, el primer release se centrará en facilitar la reserva, no en funciones administrativas.
👉 Puede interesarte: Cómo conectar visión, producto y ejecución con OKRs
🎯 3. Goal-Oriented Roadmap (Roman Pichler)
Objetivo
Planificar el producto desde los resultados que se quieren lograr, no desde lo que se va a construir.
Cuándo es útil
Para alinear negocio, producto y desarrollo en torno a objetivos comunes.
En organizaciones que usan OKR o marcos de ejecución estratégica.
Cuando se quiere evitar el enfoque de “lista de funcionalidades”.
Cuándo no funciona bien
Si los objetivos no están claros o cambian constantemente.
Si se espera saber con certeza qué funcionalidad se lanzará cada semana.
Si no se mide el impacto real de las entregas.
Cómo funciona
Se estructura en trimestres (o periodos similares) con 3 elementos clave:
Objetivo del periodo
Resultados esperados
Iniciativas o funcionalidades candidatas para lograrlos
Cada iniciativa se evalúa por su potencial para cumplir los resultados deseados. No se trata de hacer todo lo previsto, sino de entregar lo que realmente mueve la aguja.
Este roadmap es ideal para organizaciones que trabajan con OKR, ya que ambos comparten el enfoque en el impacto.
👉 Puede interesarte: Cómo diseñar OKRs con enfoque estratégico
🕓 4. Timeline (tipo Gantt)
Objetivo
Dar una visión cronológica de las iniciativas y de los entregables. Puede ayudar a definir las dependencias y expectativas para otros departamentos.
Cuándo es útil
Cuando hay que coordinar con múltiples equipos o proveedores.
Si la dirección necesita estimaciones a medio plazo.
Para roadmap de portfolio o releases importantes.
Cuándo no funciona bien
Si se interpreta como una promesa cerrada (en lugar de una planificación tentativa).
Si los equipos no tienen suficiente autonomía.
Si no se actualiza tras aprender en cada iteración.
Cómo funciona
El roadmap muestra un eje temporal (meses o trimestres) y cada iniciativa se representa como una barra en ese timeline.
Puede indicar:
Inicio y fin estimado
Estado (planificada, en curso, entregada)
Áreas responsables o dependencias
Aunque puede parecer menos “ágil”, un timeline puede convivir con marcos adaptativos si se usa como herramienta de coordinación, no de control. Lo importante es que refleje las hipótesis actuales y se ajuste cuando la realidad cambie.
👉 Puede interesarte: Qué aporta Scrum a la alineación estratégica con OKRs
🛤️ 5. Visual Roadmap (tipo carretera)
Objetivo
Comunicar la visión de producto de manera inspiradora y accesible para todo tipo de audiencias.
Cuándo es útil
En sesiones de visión, lanzamientos o comunicación interna.
Para implicar a personas no técnicas o no digitales.
Cuando se quiere representar grandes etapas del producto.
Cuándo no funciona bien
Si se pretende usar como herramienta operativa.
Cuando se necesita un alto nivel de detalle.
Si se interpreta como una previsión exacta.
Cómo funciona
Se dibuja una carretera con hitos importantes en el camino (releases, funcionalidades clave, cambios esperados).
No pretende mostrar backlog o fechas exactas, sino visualizar el viaje hacia una visión compartida.
Es especialmente útil al lanzar una nueva iniciativa, redefinir el propósito del producto o compartir avances en una revisión trimestral. Puede ser una herramienta emocional más que operativa.
🎯 ¿Cómo se relaciona una hoja de ruta con los OKR?
Los OKR y los roadmaps no compiten, se complementan. Mientras los OKR definen qué queremos conseguir (outcomes), el roadmap muestra cómo lo vamos a intentar (outputs e iniciativas).
Veamos dos casos donde esta combinación brilla:
✅ Caso 1: Roadmap orientado a impacto
El Goal-Oriented Roadmap se potencia cuando trabaja junto con OKR: los objetivos dan dirección, mientras el roadmap define posibles caminos. Esta combinación permite centrar el esfuerzo del equipo en conseguir resultados medibles, no solo en ejecutar tareas.
OKR: “Reducir el tiempo de activación de nuevos usuarios de 5 a 2 días”.
Roadmap (Goal-Oriented): incluye iniciativas como rediseñar el onboarding, enviar guías interactivas o lanzar una demo guiada.
Éxito: el roadmap no se evalúa por entregas, sino por si las métricas del OKR mejoran.
✅ Caso 2: Story Map guiado por OKR
El Story Map ayuda a visualizar el viaje del usuario, mientras los OKR definen qué puntos de ese viaje deben mejorar primero. Esta sinergia permite definir releases basados en impacto, no solo en funcionalidades.
OKR: “Incrementar el uso recurrente de funcionalidades clave en un 20%”.
Roadmap (Story Map): estructura las experiencias del usuario y organiza releases según ese impacto deseado.
Alcance: no se define por lo que cabe en el sprint, sino por lo que se necesita para mover el indicador del OKR.
🧠 Reflexión final
Tener un roadmap no es suficiente. Lo importante es que te ayude a pensar, priorizar y comunicar mejor. Elegir el tipo de hoja de ruta adecuado —y conectarlo con los objetivos reales de la organización— es lo que convierte una herramienta visual en una verdadera palanca de alineamiento.
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